Sebastian Siemiatkowski, CEO de Klarna, acaba de soltar la bomba: la inteligencia artificial ya está reemplazando a empleados en su empresa.

No es una predicción futurista, no es una teoría loca de Silicon Valley.

Es un hecho.

Y su advertencia es clara: cualquier trabajo puede verse afectado.

No es la típica historia de «los robots nos van a quitar el empleo» con la que nos llevan metiendo miedo desde hace años.

Siemiatkowski está en primera fila, viendo en tiempo real cómo la IA no solo mejora procesos, sino que hace tareas que hasta hace poco solo podían hacer humanos.

Pero aquí viene lo interesante: en vez de esconderse o llorar por lo inevitable, él está usándolo a su favor.

¿Cómo?

Automatizando tareas clave, haciendo más eficiente su empresa y, lo más importante, preparándose para un futuro donde la productividad ya no depende exclusivamente de la capacidad humana.

La gran pregunta no es si la IA te va a afectar.

La cuestión es si vas a estar del lado de los que la usan para avanzar… o de los que se quedan atrás viendo cómo el mundo cambia sin ellos.

Tú decides.

Japi dei.